lunes, 24 de noviembre de 2008

EL TIEMPO

Cuando somos niños el tiempo no existe. Crecemos despreocupados, entregados a un presente infinito lleno de juegos, novedades, aprendizaje constante y de inocencia…Como alguien dijo lo que más me gustaría no sería recuperar la inocencia sino el momento en que la perdí, pero este es otro tema.

De repente los días empiezan a precipitarse, lo que antes fue eterna juventud ahora se transforma en fulminante velocidad. La rutina acelera nuestras vidas. Tras acumular una serie de sucesos, que para cada individuo son distintos, pero que tienen el denominador común de ser negativos (la pérdida de un ser querido, un fracaso irreparable, una enfermedad…), somos conscientes de la existencia del tiempo, sufrimos su tiranía, ya que empezamos a medirlo, a aprovecharlo o desaprovecharlo con la consiguiente mala conciencia al ser conocedores de su límite pero ignorantes del momento final.

Por lo tanto seguiremos el consejo del poeta Garcilaso…

coged de vuestra alegre primavera

el dulce fruto, antes que el tiempo airado

cubra de nieve la hermosa cumbre;

marchitará la rosa el viento helado.

Todo lo mudará la edad ligera

por no hacer mudanza en su costumbre.

domingo, 16 de noviembre de 2008

EL REY DEL JUEGO


Suena Ray Charles mientras caminas por las calles de Nueva Orleans. Te vas a comer el mundo. El ritmo de los negros te lleva.


Quieres ser el mejor aunque para ello tengas que arriesgarlo todo después sabrás asumir las consecuencias, ¿verdad? Eres un tipo duro, irresistible…con un atractivo muy especial. Solo Paul Newman puede competir con tu mirada. Creaste un estilo que muchos han copiado.


Eres un soñador. Confías demasiado en tú estrella. Eres el Rey del Juego.


Aunque creas que eres el mejor si la suerte no te acompaña puedes perder.

domingo, 2 de noviembre de 2008

LA MONTAÑA

La diviso en la lejanía trayéndome a la memoria tan gratos momentos. Cimas de las más variadas altitudes, múltiples paisajes, todas con encanto.

Algunas me hicieron llorar, otras soñar, otras me hicieron sentir miedo…pero siempre he disfrutado.

El tiempo parecía detenerse eternizándose en las cumbres. El sentimiento de libertad penetraba intensamente y aún permanecía algún tiempo fluyendo por mis venas como nutriente necesario para sobrevivir.

Ahora la contemplo con tristeza. Me pregunto cuando cuándo recorreré las blancas crestas. ¿Qué sentiré?

Con frecuencia en mi vida he sentido que al realizar proyectos su consecución no era lo más importante. El camino que transitamos es un fruto esencial que no debemos desestimar. En la medida que saboreemos el trayecto habremos podido sacar el jugo plenamente a nuestro propósito, porque el final nunca es como te lo imaginas. Cuando más jóvenes somos menos nos deleitamos con el proceso ansiosos de llegar a la idealizada meta.

Es sorprendente la capacidad de adaptación a las circunstancias que tenemos. Cuanto más sabio, mayor es la conciliación. Y si ahora no puedo sustentarme con la savia de las cimas, procuro no dar concesiones con mis emociones a todo aquello que no puedo realizar.

La montaña seguirá ahí: inamovible, bella, eterna…esperándome para alimentarme de nuevo, con todo el amor de dos amigos que desde hace tiempo esperaban encontrarse.

jueves, 30 de octubre de 2008

ELOGIO A LA PEREZA


Entre las lecturas que acompañan estos días de lluvia y chimenea está de una forma significativa “Una vida sin principios” de Henry D. Thoreau.
Surge la siguiente reflexión: ¿de qué forma se nos va la vida?
Sería importante tomar consciencia sobre si vivimos la vida que queremos vivir. Prácticamente desde que nacemos nos incorporamos al engranaje sólido de la sociedad: educación, trabajo, pareja, hijos, ocio… ¿hacia dónde nos dirigimos?
Nos han educado en la cultura de el trabajo hace al hombre, pero nos han hecho esclavos de un tirano económico y moral creando necesidades artificiales y absurdas para la cuales debemos dedicar plenamente nuestra existencia para pagarlas, como si no fuéramos personas de otra forma!
“…un hombre puede ser muy trabajador y en cambio no emplear bien su tiempo. No hay mayor equivocación que consumir la mayor parte de la vida en ganarse el sustento.”
“…cómo hacer de ganarse la vida no sólo algo valioso y honorable sino algo apetecible y glorioso, porque si ganarse la vida no es de ese modo, esto no sería vivir.”
La sociedad lejos de hacer algo con respecto a los medios de ganarnos la vida ha ido en dirección contraria. Cuando más avances, más sociedad del bienestar…más hipotecados, más esclavos, más desequilibrados…
Nuestra sociedad del bienestar se sustenta en los que no tienen nada, en el tercer y cuarto mundo.
“Somos una población laboriosa y activa que conoce las comodidades de la vida y que tiene necesidades artificiales que le inducen a extraer del país sus múltiples recursos.”
Como muy bien expresa Juan José Coy en su introducción al libro “Desobediencia civil y otros escritos” de Thoreau: Al sumidero van tantas y tantas esperanzas de una sociedad más justa, más libre, más igualitaria, en la que el hombre no sea lobo para el hombre ni los capitanes de empresa y reyes de la industria sigan explotando al amparo de un sistema, económico y político. Este elogio a la pereza que lleva a cabo Thoreau en su ensayo, como mecanismo de defensa, como táctica de resistencia civil y pacífica, pretende llegar a la preservación interior, a no dejarse contaminar ni convencer por las doctrinas económicas y sociales “liberales” al uso, de las que se convierten en portavoces interesados –es decir, beneficiarios de la corrupción- los políticos.
El elogio a la pereza, o el ocio creativo, es cosa muy distinta a la holgazanería. El ocio creativo es beneficioso para el individuo, es una acción pacífica de resistirse al sistema, esta a favor de los desfavorecidos.
Cuando el hombre haya renunciado a todas sus aspiraciones y retorne a la desnuda existencia participará de la tranquilidad de ánimo que constituye el fundamento de la felicidad humana.

jueves, 23 de octubre de 2008

Estos días se ha paseado por mi galaxia Syd Barrett, y ya se sabe con Syd nada es gratuito. Junto con Erik Mercurio estuvimos dando largos paseos cayendo en un otoño atormentado y colorido. En nuestras charlas hablamos de la gente que se cree sin problemas, que ve locos a los demás cegados por su propio egocentrismo.
Mientras metíamos los pies en las frías aguas Mr. Octopus nos acarició con sus tentáculos abriendo las puertas de la percepción para invitarnos al otro lado del espejo. El sol empezó a brillar con más intensidad dando reflejos dorados a nuestros cabellos al mismo tiempo que la ácida limonada refrescaba nuestras gargantas sedientas. Una música en la lejanía sonaba impulsando a mover los cuerpos a su ritmo con un deseo de liberación de toda la opresión contenida. Las hojas caían entonando la melodía de la no preocupación. En ese momento nada importaba: ni el abandono de los amigos, ni el descontento por un sistema incomprensible, ni la falta de dinero, ni la depresión endógena que nos absorbe en ocasionas hacía el callejón sin salida de las frustraciones, el desánimo y la apatía.
Syd se fue dejándonos sumidos en la reflexión sobre la relatividad de las dificultades, y que el camino acertado puede ser el mirar el mundo sin esperar nada a cambio.


viernes, 10 de octubre de 2008

Si la comarca de la Vera sufre muchas carencias no es por falta de recursos, que los tiene y en cantidad, sino por quienes los gestionan. Y es que consideramos que personas que sustentan ciertos cargos deberían estar preparadas para desarrollarlos de forma que beneficien al conjunto de la población y la comarca. El pensamiento obtuso se enfrenta al mundo como una amenaza. Tiene la convicción de que lo exterior le es perjudicial por principio, sin valorar los pros ni los contras. Se alimenta de sus propias sustancias sin límite, de tal manera que no da pie a la regeneración y termina corrompiéndose. Y es que quien nace zopenco muere zopenco. Cuando la mente es estrecha y la mirada sin perspectiva las oportunidades pasan por delante sin aprovecharlas. También es frecuente que se prefiera el prestigio personal al provecho de quienes los han elegido democráticamente. Aunque en este punto yo lanzaría una pregunta: ¿estamos todos capacitados para tomar una decisión con respecto a quién debería gobernar? No responderé cual puede ser la alternativa a la democracia pero esta no es la solución, la prueba es obvia. Solo tenemos que evaluar a los políticos. Por supuesto que esto es la pescadilla que se muerde la cola. No interesa tener formado intelectualmente a los votantes. Por algo inventaron el circo los romanos. Ahora tenemos la televisión basura y otras tantas cosas…pero esto es otro tema.

miércoles, 8 de octubre de 2008

GINKGO BILOBA


Las hojas de este árbol, que del Oriente
a mi jardín venido, lo adorna ahora,
un arcano sentido tienen, que al sabio
de reflexión le brindan materia obvia.

¿Será este árbol extraño algún ser vivo
que un día en dos mitades se dividiera? ¿O dos seres que tanto se comprendieron,
que fundirse en un solo ser decidieran?

La clave de este enigma tan inquietante
Yo dentro de mí mismo creo haberla hallado:
¿no adivinas tú mismo, por mis canciones,
que soy sencillo y doble como este árbol?

Goethe